En notas anteriores habíamos platicado sobre la cuarta revolución y su efecto que tenía en la logística 4.0, hoy hablaremos sobre la brecha tecnológica que presenta este sector frente a esta revolución tecnológica. 

La industria 4.0 es completamente digital y se basa en el intercambio de señales e información, incluyendo el intercambio interactivo de materiales, productos, transportes y almacenamientos comunicados y vinculados entre sí. El mundo digital nos presenta una nueva forma de interacción que ha afectado los canales de comunicación en los negocios, con nuevos aparatos y elementos para uso intenso y variado de la tecnología. 

Entre elementos técnicos y tecnológicos, esta realidad está a la vuelta de la esquina, convirtiendo a la industria logística. El internet de las cosas, Big Data, Cloud Computing son temas que representan la clave del éxito para la logística latinoamericana.  

Nuestros clientes están conectados 24/7, bien informados, buscando servicios y/o productos en tiempo real, manejando sistemas digitales de gestión y pago.  

Otro tema que no debemos dejar de lado es la robótica, clave en el desarrollo de la logística. Robots Kiva® de Amazon son un claro ejemplo de la logística 4.0, operadores desarrollados por su propia empresa de tecnología que interactúan con humanos en sus Centros de Distribución. 

Tecnología 5G con respuesta en nanosegundos, ubicuidad, vinculación de múltiples aparatos, alta velocidad, elevada capacidad de transporte para señales y datos, bajo consumo de energía y cobertura global, serán virtudes que hacen posible el internet de las cosas en varias industrias.  

Ya es un reto desafiante para la logística intentar pertenecer a este nivel de conectividad, por la complejidad de la industria y el entorno de cada actor en la cadena de suministro, pero esta realidad hiperconectada está a la vuelta de la esquina. 

Para que las operaciones logísticas evolucionen, deben estar soportadas en línea y cerrar la brecha. Tecnologías aplicadas, trazabilidad, conocimiento operativo y disciplina, serán las competencias logísticas demandadas por la Revolución 4.0.